Se acaba de estrenar la quinta temporada de esta apocalíptica serie, buen momento para realizar un repaso a estas cinco temporadas y lo que nos queda por ver.
De la viñeta a la pequeña pantalla.
The walking dead empezó como un cómic creado por Robert Kirgman y Tony Moore, si la serie os parece no acta para estómagos sensibles es por que no habéis leído el cómic, lleno de escenas bizarras, sexo explícito y violencia sin límites.
El cambio de la adaptación para la televisión respecto al cómic no acaba ahí, a pesar de tener muchos personajes pertenecientes al cómic las historias de ellos son dispares, siendo quizás las más fieles, con sus matizes, la de su protagonista Rick Grimes y su hijo Carl. Otros personajes han sido creados solo para la serie de televisión, como es el caso de Daril Dixon, un acierto por parte de los productores de la Fox, ya que es uno de los personajes que más popularidad ostenta por parte de los fans.
Otros personajes que si aparecen en el cómic mueren antes de tiempo, o aun no han muerto cuando tenían que morir, por lo tanto, a pesar de que la serie mantiene localizaciones del cómic, podemos estar hablando de una libre adaptación con respecto a su obra original.
Ritmo de la serie al nivel del caminar de un zombie.
The walking dead ofrece tensión, giros inesperados y suspense, pero también acusa una acumulación de escenas, incluso capítulos de relleno, que merman el ritmo de la serie con el consiguiente enfado colectivo de su legión de fans, esta situación se ha visto aún más exagerada durante la cuarta temporada, con unos primeros episodios de enganche, un montón de capítulos soporiferos a mitad de la temporada, y una nueva aceleración en el ritmo durante sus tres últimos episodios que hacen que el espectador se quede con ganas de más.
Tras visualizar el primer capítulo de la quinta temporada, donde de nuevo hemos disfrutado de acción y adrenalina a raudales, uno se queda con la sensación de, si esa será la tónica general de la temporada, o si de lo contrario, nos vamos a lo de siempre, volver a un par de capítulos de relleno para volver de nuevo a los que te dejan pegado al sofá.
No sólo de zombies se vive.
Durante toda la serie, la amenaza zombie es una constante y el origen de todos los males que padecen los personajes, pero a poco que vamos desgranando la serie, nos damos cuenta de que el mayor peligro es la situación anárquica establecida, donde la única ley que predomina es la ley natural, donde el que mejor se adapta al entorno sobrevive. Esta ley del más fuerte plantea dilemas de moral hacia sus protagonistas, haciéndoles evolucionar de una manera que en pocas series veremos, el claro ejemplo es el de Rick, un hombre con principios y ética que se ve forzado a hacer cosas horribles con tal de proteger a los suyos, un gran acierto que provoca una situación de constante cambio en la serie.
Dentro de la situación general de anarquía encontramos muy buenos Antagonistas que hacen que nos olvidemos de los muertos vivientes por un buen rato.
Una serie sobre muertos muy viva.
La moda zombie llegó hace un par de años para quedarse, y parece que no quiere marcharse, The walking dead contribuye a ello. Se habla de un spin-off próximo, además de juegos y merchsrdaising, el cómic aun no ha llegado a su conclusión final, y la serie, parece que está muy lejos de llegar a su fin, por lo tanto, tenemos caminantes para rato.